>>1986>DorothyLa rubia capta el malestar que se manifiesta en Alexander cuando recuerda sus andanzas por las guerras divinas, claramente son memorias dolorosas para él, así que Dorothy decide dejar de excavar con preguntas sobre el pasado. Después de todo se supone que están allí pasa pasarla bien y tal vez manosearse. Eso sí, hay que señalar que Dorothy no sabe nada de lo sucedido en Cuba ni del genocidio total que tuvo lugar allí, ¿qué va a estar pendiente una adolescente primer mundista de lo que ocurra en una vieja isla del tercer mundo?
"Hace tiempo vi fotos de Lelouch, era muy guapo y tenía una mirada enigmática que te metía el
uhuhu en el cuerpo... ¡Ahora me dieron ganas de escribir fanfics de él y tú, tú y él, los dos, amándose y dandose muchos besitos! ¡Mua, mua, mua!" Dice sonriendo medio en broma medio en serio. Pero cierto es que en unos días aparecería una historia no apta para todos públicos en Fanfiction.net con la nueva pareja Alexlouch.
Dorothy patalea un poco cuando Alex confiesa que le quiere.
"¡Que pícaro eres! ¡Pero si llevamos poco tiempo de conocernos! ¿O será que el haber sobrevivido a una situación de alto riesgo hizo que quedaras flechado? Porque sino no me explico que digas esas cosas, cuernitos... Creo que intentas engatusarme con palabras tiernas. Preferiría que fueses honesto, porque yo estoy siendo muy muy franca contigo"
Dorothy no cree que Alexander le quiera tanto como a su esposa. A no ser que se hubiesen casado de boleo o por impulso, y toda la relación fuese más endeble que la Unión Europea.
La Montana acepta el beso de Alexander, pero no deja que sea corto, sino que lo toma del cuello de la camisa para mantenerlo pegado a ella y le muerde un labio, aprovecha que abre la boca para violar el interior del medico con su lengua, en un intercambio que dura 10 segundos hasta que la necesidad de aire se empieza a hacer presente. Dorothy lo suelta y lo empuja fuera del coche, rompiendo el hilo de saliva dejado entre los dos.
"¡No te tardes, mentiroso!" Sonríe, y le dice así porque sigue sin creer en los sentimientos del medico. También porque este acepta engañar a su esposa sin pensar en las consecuencias para el futuro.
Un minuto más tarde Alexander regresa luego de poner la película. Dorothy acepta probar las palomitas, pero lo hace con cautela, tomando una por una para evita envenenarse con un posible choque de EP.
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