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>V.V
Un clima tan impredecible como las criaturas que alberga el mar, pero ahora mismo en un lugar donde todo es tan monótono a la vez, basura, armas, dinero, drogas, hasta alguno que otro cadáver que probablemente ande entre toda esa pila de basura. V.V se queda parado y se agacha para agarrar un cómic de bajo presupuesto que narra la historia de un peliazul con gafas que mientras más grita más afeminado se vuelve, dando así como resultado que lo que comenzaba como un cómic de comedia al ver las últimas páginas dicho peliazul musculoso ahora era mujer y tenía 4 hermosos hijos llamadas Jaxin, Belltor, Azh y Kall... El esposo la maltrataba, pero bueno, eso es harina de otro costal, otro cómic más a la pila de revistas eróticas y cómics malos hechos con las patas. Si alguien en el caminó desarrollo buen gusto, alguien más debió de desarrollar gustos raros.

Un sonido cuánto menos estruendoso hace que V.V se ponga alerta, ¿Le descubrieron? Quien sabe... Pero lo cierto es que (hasta donde entendí, kek) continuo caminando y las cosas escalaron al terminar el basurero, una enorme mano lo tomo y estuvo a punto de llevarlo a su boca, la resistencia es inútil, aunque repentinamente alguien dice que la deje en el suelo, que solo es una niña.

(¿Niña...?)

Piensa V.V al ser confundida con una fémina (KEK), lo cierto es que el pelo largo y su baja estatura acompañado de su cuerpo con poca contextura no ayuda en nada a que parezca un hombre.

El titán baja a V.V, con mucho tacto y haciendo daño nulo, se esperaría lo contrario de algo tan grande, pero lo cierto es que es tan gentil y tierno como la caricia de una madre al pelo de su hijo.... Eso sí la madre pudiera medir 80 metros.

Una chica de flamante cabello verde, uniforme blanco y completamente pulcro en conjunto con una cicatriz que adorna su cara y probablemente contara alguna historia de como se la hizo, aparece. V.V queda al frente de la chica, él sube la mirada.

Muchas veces las personas no nos encontramos dónde nos gustaría estar, pero a veces sí nos encontramos dónde deberíamos de estar... ¿Destino? Se podría decir que si, cada persona tiene uno, siempre me ha gustado esa palabra, porque a decir verdad, no creo en milagros.

V.V igual cree en el destino, no llego hasta donde está solo por la obra y gracia de quién sabe que, aunque como cree en el destino también cree en el esfuerzo.