>>2621
<La Guerra de Castas
Marceline: Ah, entonces no hay problema. Prosiga ciudadano.

La banquera acepta la excusa del tuerto con una sonrisa aparentemente inofensiva como la planta de Cosmo, le da la espalda y pasea por el jardín silbando como si todas sus sospechas desaparecieran, despreocupada, vulnerable, como si fuese la cosa más sencilla de sellar en este mundo, la tentación máxima para cualquier sacerdote o profesional de la materia. Es ahí cuando Devdan esta a poco de picar y usa su ojo loco contra Marceline, que por un segundo tiene un vistazo directo a la verdadera forma de la banquera no sé que consecuencia tenga hacer un sellado fallido en tu mono, ¿sangra? ¿le explota el globo ocular? ¿acorta su esperanza de vida? ¿Termina como Saul, con un ojo para acá y otro pa' el sur?

Marceline: Huhuhu, un escalofrío me subió por la espalda, ¿qué habrá pasado?

La Von Karma se detiene y busca el origen de ese sentimiento. Nunca nadie la había intentado sellar, así que está un poco sorprendida a la par que emocionada.

Luccas no devuelve la pulla al moreno, solo se le queda viendo con ojos gélidos como diciendo ¿Es en serio? Pero en fin, lo deja ser feliz con sus comentarios y se enfoca en ir más pronto que tarde con la tal Sheeva. Es entonces cuando Lady Lady hablan y expresan su papel como guardianes de la señora de todos los atención al cliente.

Lady Joy: La petición fue anónima, y dudo que la señorita Marceline quiera exponer la identidad de un cliente dispuesto a pagar tanto. Véase que triplico nuestra cuota habitual, y eso no es común. Consuélese sabiendo que una persona en este mundo desea la seguridad de su señora tanto como usted.

¿Quien estará detrás de la protección de la chubby? ¿Será obra de Future Atago? ¿Tal vez un Von Karma? ¿O Kirbo? ¿Quizás diosito que está en el cielo? ¿O simplemente es el banco ganándose el buen favor de la joven? Las posibilidades son tantas Dime, Chester, ¿qué piensas que podría ser?