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Cy, mientras estén afk, vas a estar de jefa y contigo va a ser con quién va a tratar la gente y eso... La protagonista en pocas palabras kek

Parecía que tus compañeros te iban a dejar sola a Merced del destino en un pueblo medianamente desconocido lleno de turistas... ¿Habría algo que pudiera salir mal?... Obvio que no, aunque hubiese guardias borrachos dentro de la taberna, no eran los únicos guardias del pueblo, si algún loco le picaba por estar secuestrando mujeres a diestra y siniestra, esa misma tarde habría ejecución pública en la plaza del pueblo kek.

Así que, sin mucha preocupación aparente, caminaste a paso relativamente rápido hacia el establo de renta y transporte, el mismo era algo sencillo: Una casa alta y ancha en donde había un pequeño corral con los caballos estacionados, tomando agua y comiendo de vez en cuando. El local se hacía llamar: El Caballo Cojo, con el subtítulo de "Para todos sus viajes y comodidades", acompañado de un cartel de "Favor de no vomitar frente a la puerta, multa de 50 monedas de oro".

Pero aquello no importaba mucho, había que moverse, y había que moverse rápido, así que, cuando entrabas, tu vista se encontraba con un hombre regordete y pequeño, el cual estaba distraído leyendo un libro, pero al momento en que la puerta se abrió, y tus pasos chocaron con la madera del suelo, rápidamente se puso atento

>Tendero
"¡Uy! ¡Un cliente!" Dijo por un momento, acomodandose el cabello, y juntando sus dedos al mismo tiempo como todo un judio

"¡Bienvenida al Caballo Cojo! ¿Que le puedo ofrecer el dia de hoy, señorita?... Tenemos caballos de la mas pura sangre disponible por estas tierras, así como también algunas mulas de carga, y unos cómodos carruajes para viajes, usted solo dígame y con gusto será atendida"

La conversa no duro mucho en ese momento, ya que fuiste clara y concisa: Rentar unos cuantos caballos y listo, sin nada de viajes ni demáses. En total, la cuenta por la renta de los caballos, terminaba en alrededor de 400 monedas de Oro, osease, 100 monedas de oro por cada integrante del grupo... Aunque de primeras el tendero se negó en aceptar un 'Pagare' como respuesta, terminó cediendo y bajando un poco el precio por los caballos, a 300 monedas de Oro, los cuales debían ser pagadas dentro de un plazo de 3 días.

Tras unos breves momentos en donde el tendero mando a uno de sus empleados a buscar los caballos y las monturas, estos 4 se encontraban estacionados a las afueras del bar, en donde un desafortunado borrachín terminaba tambien siendo sacado entre varios hombres y lanzado a la calle, tenía pintas de haber recibido una paliza, pero eso era lo de menos, lo que importaba era que ya tenías los caballos, y que al fin el resto se le había dado por salir y dejar de beber. Para tomar el rumbo hacia el poblado, tendrían que tomar la salida sur del pueblo, que es por donde se encontraba también la plaza del mismo, y después, tomar un pequeño camino para poder escalar una monte no muy pequeño, de aproximadamente 30 metros a lo mucho, para poder después guiarse con el cauce del río Hork, el cual, les llevaba directamente hacia el poblado Que por ahora llamaremos Rhork. No obstante, siguiendo la vía y el cauce del río, aunque llegarían más rápido, era una vía que no era muy concurrida debido a su estrechez, mientras que, si seguían el camino real, aunque verían a lo lejos el río Hork, y no había una ruta que les llevase directamente hacia Rhork, que no fuera bordeandola, o siguiendo el Río Hork. Con los caballos, esto último no debería ser mucho problema.