Gracias al negro de Seikichi por rescatar lo que pudo de hilo.
<Pietro: lunes 10 de enero, año 2590. 11:30 PM >A Larry no le sobra el tiempo para ser más claro, tiene que correr y cuidarle las nalgas a Sophita. A ti te toca lidiar con una pareja menos atractiva: Un drone armado
>Te mentalizas y corres. Percibes como nunca el viento que sopla contra ti, ese que silba como un alarido por el callejón, y lo "asimilas". Te vuelves más liviano, pero también despejas demasiado tu mente, tanto así que cuando das un salto y quedas a pocos metros de la maquina voladora, no sabes muy bien qué hacer y casi te pierdes del mismo modo que lo hace la brisa, amenazando con quedar con un fuerte daño cerebral auto-infligido...
>Sin embargo el sonido de un tambor (De arma) girando te hace reaccionar, justo a tiempo antes que choque contigo la primera bala
>Asimilas el trozo de gundamio que guardas en tu bolsillo, en pocos segundos tu piel se ve curtida por el blanco y la resistencia de dicho material (RE 16). El dron dispara una ráfaga de proyectiles que chocan contra tu pecho, te duele y te agrietan, pero no te detienen
>Lo golpeas desde arriba. Tu puño revestido por el gundamio rompe las hélices como si fuesen de papel mache y conecta como un martillo contra la maquina. Ambos caen de vuelta al callejón
>Tu aterrizas de cuclillas. El drone aterriza siendo más chatarra que otra cosa, pero aun con la luz de su visor tenue, las hélices rotas, y con solo un cañón giratorio disponible, sigue siendo una amenaza