OP 03/17/2021 (Wed) 19:41:19 No.7321 del
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>>6786
<Seikichi: Lunes 10 de Enero, año 2590. 7:30 AM
>Te tragas la rabia de tener tu aspecto empañado por la salpicadura de la moto de un malviviente, porque más se perdió en la guerra y muchos volvieron silbando. También antes que puedas echar un vistazo más profundo a las propiedades de la chica desafortunada, esta sube al autobús. Tú haces lo mismo

>Consigues un puesto junto una ventana, desde allí presencias como el autobús se eleva, deja abajo las carreteras y edificios, y empequeñece a las personas que llegados a un punto lucen como hileras de hormigas sin una reina que las comande. El vehículo vuela, y el tiempo lo hace también, atrás quedan las costas contaminadas del este de Downtown y ahora sobrevuelan la inmensidad del océano, bello y lleno de vida...

>Pero no logras apreciar demasiado del paisaje porque el bus se sumerge en un cumulo de nubes que actúan como una cortina de niebla. Sin nada con que deleitarte en el exterior, no tienes más remedio que echar un vistazo al abanico de jóvenes que toman lugar en aquella lata de sardina amarilla. Ya sea por casualidad, o por tu interés hacia los SpeedCube, te fijas en la muchacha de ropas caras y notas su expresión de horror y alarma. Yunyun mira por la ventana, luego mira hacia los que están dentro, parece querer con urgencia decirles o advertirles sobre algo, pero no encuentra el momento o las palabras correctas (En el spoiler lo que está viendo Yunyun, puedes abrirlo si quieres)

>En caso decidas aventurarte donde Yunyun para consolarla o descubrir qué le atemoriza tanto, apenas sales fuera de tu puesto el bus se sacude por una ráfaga de aire y tropiezas, caes y acabas con la cara enterrada en algo suave. Al abrir los ojos, lo único que puedes ver es un color café

Morena: Si estás cómodo me avisas y no me muevo.

>Dice la chica a la que le pertenecen los pechos donde aterrizaste, ella te observa a los ojos con una media sonrisa

Morena: Ya, úshcale. Para la próxima no te pases y pídeme una cita primero, lechuga.

>Te apoda lechuga porque tienes el pelo verde, la cabeza redonda como una, y no eres muy grande que digamos. Es un apodo tonto, pero funciona bastante bien en ese ambiente estudiantil, flota sobre tú identidad como algo que amenaza en etiquetar tu presencia de aquí hasta que acabe el año

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